MUSICA

miércoles, 27 de febrero de 2008

HOY LA VIDA...

Anhelo que el tiempo se interrumpa…
que se esfumen en un instante estas horas eternas,
donde el espanto y el frío me cercan,
poniendo escarcha en mi sangre y en mi alma .

Hacer que se aquieten mis recuerdos,
que repiten con dureza dentro mío,
las tristes palabras que dijiste, y que me condenaron,
a la cruel condena de la soledad perpetua.

Aquietar hasta al mínimo el ritmo de mi corazón,
que ambiciona con locura dejar de palpitar,
mientras reza con impaciencia por ese golpe final,
que lo detenga para siempre.

Hoy la vida me duele mucho.
La tristeza hundió con afán atroz sus zarpas,
desgarrando mi espíritu hasta dejarlo en jirones.
Hoy me hirió el desaliento y el hastío.
.
Las lágrimas se agolpan en mis ojos,
y si bien lucho por detener,
el quiebre del dique que las contiene,
no puedo evitar ahogarme en ese océano gris.

En mis manos se durmieron las caricias que ofrecía,
en mi boca se acallaron las palabras sinceras,
y enterré junto a mis ganas todos mis sueños.

Hoy la vida cosechó de la viña de mi tiempo,
solo aflicciones y espinas
donde antes había sembrado semillas,
de dulces promesas de cariño sincero…



viernes, 22 de febrero de 2008

MAESTRO DE PALOMAS

Para Raúl

Con paso plácido se aproxima el hombre de semblante curtido,
a la gran jaula donde reposan de sus largas travesías,
sus apreciadas palomas.
Con cuidado extremo toma a la más pequeña,
un copo blanco que entre sus dedos tiembla.

Los ojos quietos de color del cielo se matizan de ternura,
cuando acaricia suavemente las delicadas plumas,
que cubren la cruel herida.
Un graznido y el ligero ensayo de huir expresan,
cuanto sufrimiento siente el ave.

Como si de un niño se tratará le susurra,
añejas historias donde se unen brillantes hadas,
viejos duendes, piratas valientes, y alguna estrella distante,
intentando por un momento que olvide cuanto sufre.

El ave expectante entre los fuertes dedos se acomoda,
el maestro de palomas con afecto sana la llaga,
mientras se pregunta si tendrá la fortuna,
que la mano suave de la mujer amada,
alguna vez realice el gesto que alivie su alma.

sábado, 9 de febrero de 2008

TRISTEZA DE MUJER


Dedicado a una mujer enamorada

Anhelo que fuese posible que nuestros corazones,
pudieran revelarse con la apacible libertad que poseían.
El mío, con certeza, le declararía mansamente al tuyo,
que aún te amo, y me lastima tu ausencia, mi amor.

Si te detuvieras un instante, y descendieras de esas quimeras tuyas,
que viajan por ahí vestidas con frágiles alas de mariposas,
tal vez, lograrías contemplarme como lo hacías antes,
y distinguirías la tristeza que ensombrece mis largos días sin ti.

Pero no me miras, y yo sigo altiva por mi senda gris,
y con mucho dolor así se nos pasa la vida.
Tu recorriendo senderos de versos transfigurados de realidad,
yo tratando de hallar magia donde no la hay más.

Y así se nos pasan las horas perpetuas del no ser.
Tú amando vanamente a una fría estrella que jamás te amará,
Yo, dejando morir mi añejo amor,
con el peligro que junto a él sucumba mi alma definitivamente
.

viernes, 1 de febrero de 2008

AÑEJO APETITO


Aproxímate a mi lado y cede ante el gesto de mis manos,
que sobre tu enérgico cuerpo van dejando esas caricias
atesoradas durante mucho tiempo dentro mío,
y que hoy siento muy profundo que solo tú mereces.

Voy a beberme suavemente de tu boca,
la miel cálida de tus besos,
y te robare junto a tus gemidos de placer contenido,
tu alma generosa que se entrega sin límites.

Será mi cuerpo el noble maná con el que aquietarás,
el añejo apetito de amor perpetuo,
y cuando al fin pruebes el fruto erótico de mis ganas,
ascenderemos sin palabras más allá de las sábanas.